lunes, 23 de mayo de 2011

Reflexiones


Voy a realizar aquí una reflexión sobre lo que he aprendido con esta asignatura y lo que me han  aportado  los conocimientos de literatura infantil que he trabajado.
En primer lugar, debo decir que mi concepto de literatura infantil previo a esta asignatura era nulo; en general, mi concepto de literatura era nulo.  Era consciente de que la literatura es algo fundamental, que debe formar parte de la vida, el disfrute y herramienta de aprendizaje para los niños, y de que hay libros y libros, y de que debo ser competente a la hora de saber seleccionar libros infantiles de calidad en mi futuro profesional. Era consciente de todo esto pero no sabía llevarlo a cabo.
Con esta asignatura en primer lugar, he situado en el tiempo, de forma general, la literatura, he repasado brevemente su historia y he conocido los principales tipos de literatura existente en la actualidad, que no todo lo que llaman “literatura” lo es, que hoy en día, no se enfoca como una obra artística, sino como una explotación comercial, económica, que mueve masas, sin buscar la calidad artística o la creación original de un autor.
Nos hemos, además, centrado en la literatura infantil, conociendo su origen, los primeros interesados en crear literatura para niños, niños pequeños, no jóvenes lectores, sino niños de infantil de 0 a 6 años; hemos tratado como apareció una literatura infantil, y las características que tiene que tener esta para ser verdaderamente adecuada para estas edades. Saber que para poder hacer y entender la literatura infantil se debe ser conocedor de la psicología infantil en primer lugar, y esto es algo que debo poder hacer en un futuro, pues en mi trabajo, tendré la obligación de entender la literatura infantil para poder elegir libros de calidad para mis alumnos y tendré la oportunidad de crear literatura para ellos, o con ellos, y que estos disfruten con ello al igual que yo.
También he adquirido saberes sobre los cuentos folklóricos, cuentos tradicionales, con una historia oral a sus espaldas, que podemos contar a los niños de múltiples formas. Saber que la literatura folklórica estimula en gran medida la creatividad e imaginación de los niños, por ejemplo cuando hacemos nuestras propias adaptaciones de las historias, o narramos simplemente un cuento (cuentacuentos); que debemos dejar que los niños dejen volar su imaginación a la hora de contarles cuentos sin mostrarles ilustraciones, para que creen sus personajes; o realizar una lectura con ilustraciones, ilustraciones no estereotipadas que también trabajen la imaginación de los niños, para que entiendan que hay otra forma de entender las cosas, las personas y el entorno, y que su propia forma de ver el mundo, en la literatura, es válida y reconocida.
Por último, con la realización de las diferentes actividades de la asignatura he sentido que llevaba a la práctica los conocimientos tratados. Hemos creado una biblioteca de aula, no algo abstracto, sino una verdadera biblioteca de aula, recogiendo todos y cada uno de los elementos que debe reunir (incluso cada título de cada libro del aula), una biblioteca que en este preciso momento se podría comenzar a llevar a cabo, y esto, en mi opinión ha sido de gran utilidad, pues el día de mañana sabré como crear mi propia biblioteca en mi futura clase y poder ofrecer, lo mejor que pueda, unos recursos materiales, humanos, espaciales y temporales adecuados a la hora de trabajar la literatura con mis alumnos. También hemos realizado un taller de cuentacuentos-narración-lectura de un cuento, actividad grupal en la que he llevado a cabo un cuentacuentos varias veces para varios compañeros; en esta actividad, quizás al principio me sentí algo cohibida, pero poco a poco observé que a las personas a las que contaba el cuento les gustaba lo que oían y cogí poco a poco soltura y acabe disfrutando del hecho de contar un cuento a personas que disfrutaban con ello, y a disfrutar e interesarme yo por lo que me narraban o leían mis compañeras, por lo tanto, esta actividad me ha parecido fundamental para llevar a la práctica los conocimientos del último bloque de la asignatura, además también de ver multitud de ejemplos de cómo se pueden interpretar cuentos y disfrutar haciéndolo en grupo, además de perder la vergüenza y ensayar el contar un cuento para el futuro como maestras.
Al igual que la utilidad en todas estas actividades he encontrado una proyección de futuro  y un gran interés en las actividades de crear mi propia adaptación del cuento folklórico, “Todo tipo de pieles”; crear yo misma un cuento (en este caso fabrique juntos a algunos niños un cuento en base a sus dibujos y opiniones, es decir, realice un cuento CON niños); o analizar un cuento al azar (“Una ratita muy despistada”).
En resumen, con el trabajo realizado en esta asignatura, me llevo esencialmente, la idea de hacer disfrutar al niño con los libros, de crear el interés en él por la literatura, hacer que tenga gusto por coger un libro y leerlo el mismo, o pedirte que se lo leas, cuentes, o simplemente, que inventes uno, o hacer un cuento con él; en resumen, la importancia de hacer florecer en los futuros alumnos aspectos literarios, sean de la clase que sean; una literatura que responda a sus necesidades y capacidades, una literatura que les sea de utilidad para su desarrollo intelectual, social y personal; y he aprendido también que yo haciendo todo esto debo , y puedo, disfrutar. Y pienso que todos los conocimientos y conceptos que me llevo de la asignatura literatura infantil han servido para comenzar a trabajar estas competencias que en un futuro debo tener, porque esta asignatura es solo la base para llegar a saber todo lo necesitaré conocer en mi futuro como maestra.

1 comentario:

  1. Es una descripción del trabajo realizado y tenías que entregar una reflexión sobre cada bloque.

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